Las multas y las sanciones con suspensión de cancha son los principales elementos de la nueva Ley contra la Violencia y el Racismo en el Deporte que llevaron a los dirigentes de la UNAFUT a alzar la voz en contra de la normativa aprobada esta semana por la Asamblea Legislativa.
Según el presidente del Consejo Director, Julián Solano, el principal problema pasa por el que se quiera sancionar a los equipos por acciones que cometan los aficionados. En ese sentido, alega que los clubes no tienen pleno alcance sobre esos hechos.
En el programa radial de la UNAFUT, Solano se pregunta qué pasaría si un aficionado burla las disposiciones de seguridad en un estadio e introduce una manta que luego saca a relucir durante en encuentro.
Aquí, se quejó de que solamente la Fuerza Pública puede requisar a los aficionados al ingreso al estadio, y alegó que su organización ha pedido que se autorice a los efectivos de seguridad privada a realizar ese tipo de tareas.
Además, Solano criticó las multas y las suspensiones que pudieran recaer sobre los equipos, aduciendo que ya a lo interno la entidad que preside tiene normas en ambas direcciones.
Las sanciones establecidas por la UNAFUT, que según Solano están acordes con los criterios de FIFA en temas de violencia o racismo en los estadios, son las siguientes:
“En la primera ocasión dentro del transcurso de un partido se sancionará con una multa de quinientos mil colones. En caso de que en ese mismo partido se vuelva a dar un acto de racismo y/o discriminación, la multa se duplicará a un millón de colones y el club deberá jugar el siguiente partido de local a puerta cerrada sin necesidad de apercibimiento.
“Si en un segundo partido se dan actos de discriminación y/o racismo, la multa será de dos millones de colones y se ordenará el veto de uso de estadio sede para el siguiente partido de local.
“En el caso de un tercer partido en donde se den actos de discriminación y/o racismo, la multa se elevará a tres millones de colones desde el primer acto discriminatorio y/o racista y, además, se le castigará al club infractor con la perdida de tres puntos de la tabla de posiciones del campeonato respectivo.
