La Asociación Deportiva Santos venció 2 goles por 1 al Club Sport Cartaginés, y mantiene intactas sus posibilidades de pelear por un cupo entre los cuatro semifinalistas, mientras los brumosos regresan a los típicos altibajos que tantos problemas les han generado en los últimos torneos.
Santos inició mejor. La velocidad de los jamaiquinos Foster e East era complicada para los centrales brumosos. El segundo estuvo cerca del gol en la primera llegada de los locales.
Pero, luego, hubo un paréntesis: Cartaginés tuvo dos: una de Cruz y otra de Montenegro, resueltas muy bien por Forvis. Lo que siguió fue todo de Santos, salvo un par de llegadas en los últimos minutos.
En 29 minutos, Starling Matarrita cobró un tiro libre por el costado derecho, después de una falta sobre Foster. La pelota fue directo al centro del área, donde Javon East se levantó más que cualquier otro, y remató buscando el palo de mano izquierda del arquero Parker. 1 – 0.
Dos minutos después, el mismo jamaiquino se perdió el segundo, al no decidir el remate y conducir en exceso cuando se enrumbó solo sobre el área.
Pero, como que a Santos le gusta regalar opciones con un Faerrón que suele cometer graves errores en el área. Esta vez, en 36 minutos, derribó a Sánchez. Un minuto más tarde, cobra el casi infalible Jameson Scott, que esta vez la pegó en la base del palo izquierdo del marco de Forvis, después de que el arquero se lanzara al lado contrario.
Comenzando no más el segundo tiempo, Cartaginés recuperó el balón en el medio campo y la jugada terminó con un remate de Russell que fue al palo largo. Y dos minutos después, el mismo Russell obligó a Forvis a un gran desvío sobre el marco.
Y la tercera fue la vencida: en el cobro del saque de esquina por parte de José Carlos Pérez, el balón fue al segundo palo, donde ingresó sin marca Joaquín Aguirre, para cabecear a placer y conseguir la paridad. 1 – 1.
Cartaginés quería más. Russell seguía metido en el juego. Le sirvió un excelente pase a Montenegro para dejarlo de cara al marco, pero remató desviado.
Tras 15 minutos, Santos volvió al juego, pero con muchas imprecisiones. Aún así, el partido ahora era mucho más parejo. Cuando daba la sensación de que los equipos se anulaban entre sí, Chaves envió a Malique sobre la banda, para tratar de desequilibrar desde allí. El problema es que los centros iban casi todos a la posición de Parker.
Y Cartaginés sacó a Hernández del banquillo, aunque no le fue fácil meterse al partido.
