En nuestro fútbol hay dirigentes que hacen cada cosa que “se para el sol a verlos”, como dicen en mi pueblo. En realidad, no estamos diciendo nada nuevo, pues todos los días se ven y se escuchan cosas que evidencian el desprecio por las leyes y otras nomas con que actúan muchos de los dirigentes.
Traemos el tema a colación a propósito de tantas cosas que dijeron varios dirigentes cuando la Dirección General de Migración impidió que siguieran tomando parte del Torneo Clausura 2022 del fútbol de la primera división nacional aquellos jugadores extranjeros que no tenían permiso de trabajo en el país.
Varios dirigentes del fútbol nacional protestaron, cuando en realidad, si fuesen serios debieron sentir vergüenza por tanta irresponsabilidad. Algunos incluso llegaron a acusar supuestas actuaciones antojadizas por parte de Migración, pese a que en ningún país del mundo un extranjero puede llegar a trabajar solo porque sí.
Y, se quejaron también de que Migración no les ayudaba, a pesar de que en esa entidad se hicieron de la vista gorda ante el problema por varios años. Eso ciertamente favoreció que esos mismos dirigentes decidieron entrar en una dinámica de ignorar la legislación, como si el fútbol tuviese una especie de fuero especial.
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Cuando pasaban las semanas y algunos jugadores no recibían el aval de Migración, hubo dirigentes que llegaron al extremo de acusar lentitud intencional de parte de los funcionarios a cargo de las autorizaciones. Ello, a pesar de que había jugadores con más de año y medio en el país que no habían presentado sus documentos y ni siquiera tenían cita para acudir a regularizar su situación.
Como si todo esto fuese poco, ya desde hace casi un mes el Municipal Grecia anunció al mexicano Javier San Román como su nuevo técnico.
Es cierto que en las listas oficiales que presentan los equipos a los árbitros previo a cada partido quien aparece como técnico de Grecia es José Araya. Pero, ojo: todos saben que San Román es el técnico.
Ni Araya ni ninguno de los jugadores del Municipal Grecia lo han ocultado. Todos se refieren a él como el técnico. Eso, más allá de que el propio club lo publicó así en sus redes sociales y lo informó así a los medios de comunicación.
Nos preguntamos: ¿será que los dirigentes de Grecia creen que trabajar se limita a ir al banquillo en cada partido? ¿Será que son tan cortos de inteligencia que creen que entrenar un equipo de fútbol no es un trabajo?
Me niego a creer tales cosas. Prefiero entender que la dirigencia de este equipo ha optado por seguir en una dinámica de irregularidades administrativas, algo que no es nuevo allí, pues ya hace un tiempo dieron en administración el equipo sin seguir la normativa aplicable en esa materia.
Nuestro fútbol no va a alcanzar un verdadero nivel de profesionalización si se siguen dando situaciones como estas. Pero está claro que a la dirigencia no le importa; ni a nivel de los equipos, ni desde la Unafut, ni desde la Federación Costarricense de Fútbol.
Lo único que les interesa es que se puedan jugar partidos independientemente de qué hagan para lograrlo. Si el campeonato está en marcha, nada más importa, parece ser el lema de nuestros dirigentes.
Es una verdadera lástima que den tan malos ejemplos…
