“A Saprissa le gusta jugar este tipo de partidos y siempre lo hemos dicho. Saprissa está hecho para los partidos grandes. Y si estamos en esta final es porque nos lo ganamos. Quedamos de líderes”.
Con ese nivel de confianza habla Cristian Bolaños cuando se refiere a la final que se viene para su equipo, frente al Club Sport Herediano.
“En la parte nuestra, estamos preparados. Estas dos semanas nos ayudaron mucho para juntarnos a hablar de esos pequeños detalles. Y ya todo eso quedó superado. Y ahora todos estamos enfocados en ir a hacer un partido bastante agresivo, pero inteligente. Son dos partidos decisivos”, dice al recordar los errores cometidos por el Deportivo Saprissa en el partido de ida de la semifinal de la segunda fase del torneo, hace apenas tres semanas.
Bolaños no pudo estar con el equipo en la definición del título en el torneo anterior. Una lesión lo sacó de la recta final del campeonato, y estuvo a punto de dejarlo fuera del Mundial de Rusia 2018.
“Son situaciones que uno atraviesa como jugador de fútbol. Obviamente, me gusta más estar en el terreno de juego que estar en un palco; paso más nervioso estando afuera de la cancha, entonces, si me ponen a escoger, prefiero estar en la cancha, que se que les puedo ayudar allí, y puedo controlarme”, reflexiona al recordar la experiencia.
El mediocampista reconoce que el equipo también está pendiente de la posibilidad de los lanzamientos de penal, como recurso para definir la serie. De hecho, preferiría que, de haber empate tras los 180 minutos, se pasara directamente a la definición desde el punto blanco. “Al final, lo mejor sería terminar un partido e ir directamente a los penales, y no pasar por esos tiempos extra, que al final le quita un poco el espectáculo”, afirma.
Y, en cuanto a la práctica de los lanzamientos, “obviamente, al final de los entrenos intentamos hacer unas dos, tres rondas de penales, quien se sienta cómodo. Yo digo que es competencia. Cada uno intenta sentirse cómodo; tirar el penal donde se sienta más confiado y, obviamente, todos apoyamos a los compañeros cuando toman una decisión”, explica.
El jugador no pone excusas por el hecho de que Saprissa tuviera que parar dos semanas y meda para esperar al otro finalista del torneo, tras ser eliminado por el propio Herediano.
“El campeonato está así y hay que amoldarse. No es lo mejor. El campeonato está un poco raro, un poco extraño. Pero, se intentó aprovechar. En las dos semanas pudimos recuperar compañeros lesionados y otros que estaban golpeados. Se pudo trabajar un poco la parte física para volver cargar energías, y ya estamos listos para lo que viene”, comentó.
