La prioridad es alcanzar la segunda ronda del Campeonato Sub 20 de la Concacaf. Es la única forma de entrar, realmente, en la disputa por un cupo para el Mundial de Polonia 2019. Y solo clasifica el primero de cada grupo, tras la primera fase.
Por ello, para la Selección Nacional era clave ganar su partido ante Haití. Y así fue. Un gol por cero, apenas, pero suficiente para sacar ventaja, precisamente sobre el rival más connotado del sector.
Los haitianos comenzaron con mucho ímpetu. Apenas en los primeros tres minutos, habían puesto a prueba en dos ocasiones al portero Chamorro, quien reaccionó muy bien, especialmente en la primera llegada.
Pero, después de esas arremetidas de arranque, los costarricenses comenzaron a marcar la pauta, pese a la velocidad de los caribeños. Comenzaron a juntarse Araya, Reyes, Jarquín, mientras tímidamente salían, desde atrás Galo y Martínez. Eso sí, la pauta la siguen marcado los centrales Mesén y Gamboa, aunque no miden bien la fortaleza al filtrar los balones, de manera que la mayoría de sus servicios se iban largo.
La falta de precisión en los servicios también encontró eco en el medio campo, mientras los hombres de ofensiva insistían, de nuevo, en hacer una jugada de más al ingresar al área, y no remataban de media distancia.
Haití ya no tenía llegadas en la primera parte. En el segundo tiempo se acercaron dos veces, incluso en una con un remate peligroso de Ronaldo Damus. Pero, fue todo.
La única anotación del juego llegó a los 30 minutos, por intermedio de Andy Reyes. Fue una juna jugada en la que se conjugó el error de la defensa caribeña con la concentración del tico.
Pierre Louis recibió un pase hacia atrás, que midió muy mal cuando quiso controlar. Reyes tomó el regalo, se enrumbó sobre el área, y tomó al portero saliendo, por lo que solo tuvo que tocar suave, para enviar el balón al fondo del marco.