En la Liga Deportiva Alajuelense a veces parecen obsesionados con volver a alcanzar un título. Más aún después que su presidente, Fernando Ocampo le diera un matiz muy particular al centenario en el marco de su gestión.
Está bien que quieran títulos. Pero, está mal que se obsesionen. Esto último lleva a malas tomas de decisiones. Y es justo lo que ha ocurrido en la Liga a propósito del tema de la contratación de extranjeros.
Lo hicieron bien al buscar seleccionados hondureños, que por lo demás venían muy recomendados por ex seleccionador nacional Jorge Luis Pinto. Y los jugadores se adaptaron muy rápido. No tardaron nada en comenzar a rendir, y a lo grande.
Vieron un jamaiquino en un partido contra el Santos, en el marco de la Liga Concacaf, y lo trajeron. Se tardó en rendir. Pero, tiene lo suyo.
Incluso, trajeron dos extranjeros con procesos de selecciones menores, y los pueden usar en tanto tengan contratos de liga menor. La extraña reglamentación de nuestro torneo lo permite.
El problema está en que se engolosinaron con la cuestión de los extranjeros, y se les ocurrió contratar un cuarto jugador hondureño. Así suman cinco extranjeros en el primer equipo. Y aquí no hay nada que interpretar. Solo pueden registrar a cuatro. La matemática dice que sobra uno.
Pero en el fútbol, no solo la matemática juega. El dilema que tienen es a quién sacan. No saben. Esperaban, tal vez, que alguno de los otros extranjeros recibiera alguna oferta de otra liga. Si eso pasó, finalmente no cuajó. Y ahora, tienen menudo problema.
La intención anunciada de comprar la ficha del jamaiquino para poder prestarlo y abrir espacio al otro hondureño, no está aterrizada. El reloj sigue corriendo, y el tiempo de acorta.
Todo esto solo demuestra un serio problema de planificación en un equipo que, precisamente por eso mismo perdió ya a algunos de sus más interesantes prospectos menores.
A veces hay que dejar de cuestionar tanto lo que hacen o dejan de hacer los demás, para dedicar tiempo a analizar, con toda objetividad, cómo se están haciendo las cosas lo interno.
Para la Liga debe ser fundamental tener un gran equipo, para poder aspirar a ganar títulos. Pero no pueden perder la perspectiva a la hora de tomar decisiones. Un equipo debe verse como una empresa. Y en cualquier empresa, tener mano de ociosa no suma; deja pérdidas.
