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Mirada Incisiva

Manejos de pulpería y otras hierbas futbolísticas en la Selección Nacional

Cuando Christian Bolaños abrió la boca y disparó munición gruesa en varios flancos alrededor de la Selección Nacional no dejó títere con cabeza.

Las declaraciones, duras pero atinadas, tienen como blanco principal, según lo que se puede leer entre líneas, a la dirigencia de la Federación Costarricense de Fútbol, al seleccionador nacional, Luis Fernando Suárez y a algunos de los jugadores jóvenes que han defraudado con la Tricolor.

Y, por supuesto, no faltó quien objetara las manifestaciones del futbolista morado, entre ellos, Erick Lonis, excapitán de la “Sele” en el mundial Corea-Japón 2002 en una posición, para mi gusto confusa.

Hernán Medford apoyó lo dicho por Bolaños, pues es claro que el momento que vive la Selección Nacional da para pensar que el mundial de Catar 2022 está muy pero muy lejano.

Lo de Lonis no lo entiendo. Critica a Bolaños porque, según él, no da nombres. Acerca de las convocatorias dice: “Yo hago cierta crítica y, ojo que respeto el derecho de todo el mundo a opinar, pero digamos que uno tiene que analizar lo que está diciendo la persona; para mí, Christian Bolaños no dijo absolutamente nada, algo de las convocatorias, bueno ¿Las convocatorias de cuál jugador? Que los cambios de entrenadores, eso siempre ha pasado en Costa Rica”.

No hay que ser adivino para darse cuenta quiénes no han dado el ancho en la Selección. Podemos mencionar a Leal, Moya, Guzmán, Marín y Lassiter, entre otros. Por cierto, la molestia de Bolaños fue con este último, porque el exmanudo, prácticamente, dio a entender en la Copa Oro que era inamovible en la Tricolor.

Aún más, ¿por qué Lonis critica que no se den nombres? ¿Acaso él y, prácticamente, todo el gremio de futbolistas de este país no ha actuado siempre así, a medias tintas? Nunca les gusta mojarse ni comprometerse.

Además, manifiesta que el manejo de la FEDEFUTBOL es bueno porque tenemos un Proyecto Gol de primer mundo. Lo tenemos no gracias a esta dirigencia. Eso es un hecho. Como también lo es que esta dirigencia ha fallado en incontables ocasiones. Por ejemplo, la escogencia del técnico de la Selección. O, ¿no es cierto que fallaron con la contratación de Gustavo Matosas, o con mantener más del tiempo debido a Ronald González y, pareciera, que ahora con la llegada de Suárez?

Eso no tiene nada que ver con un Proyecto Gol, o con que los jugadores tengan todas las condiciones para entrenar. Esas decisiones extra fútbol afectan directamente al fútbol.

Hernán Medford fue más claro y directo que Lonis. “¿Para qué esconder las cosas? Al final son cosas que todo mundo está viendo. Cuando empezó la eliminatoria yo dije que había que darle chance a la nueva camada, pero en cierta forma me decepcionaron y al final acepté que vamos a requerir de los jugadores de experiencia para sacar esto.

“… Hay que aceptarlas porque las cosas no están bien, el que diga lo contrario es que se quiere cegar, pero la situación está muy complicada”.

Ante esto, cabe preguntarse qué pensará el presidente de la FEDEFUTBOL, Rodolfo Villalobos, quien la semana pasada ya había amenazado a todo aquel que se bajara del barco o que se atreviera a criticar que después no se subirían en la nave.

¿Será Bolaños excluido de futuras convocatorias por atreverse a decir la verdad, como parece que les pasará a Manfred Ugalde y Giancarlo González, de plano ya sentenciados por Villalobos? Y, si a Suárez se le ablanda el corazón y cambia de parecer y los convoca, ¿qué hará el jerarca del balompié nacional? ¿Le ordenará dejarlos fuera?

Y todavía salen algunos a decir que el fútbol de Costa Rica no es una pulpería, cuando en lugar de manejarlo con la cabeza, lo hacen a punta de patadas y ocurrencias.

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