La eliminación del Herediano de la Liga Concacaf, a manos del Real España de Honduras, sacó la peor cara de los florenses.
Con una derrota de 3-1 en su visita a San Pedro Sula, los rojiamarillos no pasaron de un triste empate en el Nacional y por tercera vez consecutiva quedan fuera del certamen regional. Para hacer más duro el golpe, el “Team” también fue eliminado de la Concachampions.
En síntesis, el fracaso fue total, porque no solo no pudo alcanzar siquiera las semifinales de Liga Concacaf, sino que falló estrepitosamente al no poder dejarse uno de los seis boletos para Concachampions.
Más allá de eso lo que me preocupa, amén de lo que comentamos en la columna de la semana anterior del pavor que les da a los equipos ticos jugar en Centroamérica (ejemplos de Cartaginés y Herediano en Honduras), es escuchar las excusas baratas y ridículas esgrimidas por Jafet Soto y Hernán Medford luego de la derrota ante los catrachos.
Medford se dejó decir que habían sido superiores al Real España. ¿Cómo se puede ser superior a un equipo que globalmente te gana 4-1?
Y lo de Jafet Soto es simplemente risible. El gerente herediano dijo que el torneo es “bonito” deportivamente hablando, pero deja demasiadas pérdidas económicas.
Para justificar su afirmación, Soto dijo lo siguiente: “Tuvimos que pagar boletos de $1.500 para ir a Canadá y hoteles de $350 la noche. Para llevar 28 personas fue un gasto impresionante. A San Pedro Sula nos tocó cancelar pasajes de avión de 600 mil colones, en dos grupos. Para poder cumplir y llevar un equipo decente y un cuerpo técnico decente hay que poner plata”.
Curiosamente, la Concacaf otorga a cada equipo $40.000 para cubrir sus visitas a suelo centroamericano y $50.000 para viajes a México, Estados Unidos, Canadá y el Caribe; es decir, por la travesía a Canadá los florenses gastaron en boletos de avión $1.500 por 28 personas para un total de $42.000 y en hospedaje $350 por 28 personas un monto de $9.800. En este caso, los rojiamarillos pagaron $51.800, pero el ente regional les aportó $50.000 o sea su pérdida fue de $1.800.
Pero vamos al otro partido; para el viaje a Honduras, Jafet Soto afirmó que pagaron pasajes de avión con un costo de ₡600.000. Esto para 28 personas daría un total de ₡16.800.000 (aproximadamente, unos $26.000 en números redondos según el tipo de cambio a ₡650). Presumiendo, -porque este dato no lo brindó el dirigente rojiamarillo- que pagaran habitaciones de $350 habrían gastado otros $9.800 para un gran total de $35.800 lo cual les dejó un saldo favorable de $4.200, que cubrían la pérdida de los $1.800 del viaje a Canadá y todavía quedaban en caja $2.400.
Eso no es todo, resulta que Jafet Soto reiteró que “… es una copa que deja pérdidas, no solo para nosotros. Ni ganando el torneo es rentable. Si llega a la final hay un premio, pero es para recuperar todo lo que se perdió”.
Según publicó el diario La Nación, cada uno de los cuatro semifinalistas recibirán un premio de $50.000 aparte del subsidio de $40.000 que tendrán por viaje dentro de la región.
Finalmente, la Concacaf establece un premio de $125.000 para el campeón de la Liga Concacaf y $75.000 para el subcampeón. Es decir, en el peor de los escenarios, si Herediano hubiese alcanzado las semifinales habría tenido una ganancia de unos $52.000.
¿Dónde están las pérdidas económicas?