SIGUENOS

Mirada Incisiva

Selección sub20: Otro fracaso más

El blog del periodista Luis Álvarez Chavarría en Deportescr

La eliminación de la Selección sub20, que disputó el premundial en Honduras, debe contarse como un nuevo fracaso del balompié costarricense. El equipo comandado por el técnico Vladimir Quesada tuvo un torneo para el olvido, que cerró con una derrota 2-0 ante Estados Unidos, con la que se despidió del Mundial Indonesia 2023.

Más allá de fallar en el objetivo, Costa Rica pierde, una vez más, una generación de futbolistas jóvenes, con el agravante de que la Mayor requiere de un recambio urgente, ante la inminente salida de líderes como Navas, Ruiz, Borges, Waston, Duarte, entre otros.

En suelo catracho, la Selección Sub20 mostró muy poco, casi nada. En los duelos clave fue superada ampliamente. Por ejemplo, frente al cuadro anfitrión, se observó un equipo desganado, sin ambición, cuidando un 0-0 sin arriesgar. Al final, como suele suceder, perdió y ello condicionó su camino en la llave de enfrentamientos.

A pesar de que goleó a Trinidad & Tobago, 4-1, el resultado fue una gota de agua en el desierto, porque ante Estados Unidos, en el partido decisivo por el boleto mundialista, la sub 20, fue un concierto de errores. Primero, los dos goles recibidos se produjeron en los primeros 5 minutos de cada tiempo, por el mismo jugador: Aaronson, y en condiciones muy similares: por el centro del área chica.

Además, recién encajado el segundo gol estadounidense, el capitán tico Brandon Aguilera, desperdició un tiro de penal sepultando las pocas esperanzas de una remontada.

Valga decir que Costa Rica se mostró como un cuadro con mucho corazón, pero sin ideas, sin estructura. La escuadra depende mucho de Aguilera; todos los jugadores lo buscan a él, y si bien es un gran futbolista, solo no puede hacerlo todo.

De las últimas cinco copas del mundo de la categoría sub20, Costa Rica solo asistió a una: Corea del Sur 2017. Antes había fallado en su intento por asistir a Turquía 2013, Nueva Zelanda 2015 y Polonia 2019.

De acuerdo con lo expresado por Kenneth Barrantes, en el diario La Nación, el quedar eliminados de un nuevo Mundial afecta directamente a la Selección Mayor. ¿Por qué?

“Afecta a nivel mayor porque se vuelve a perder otra generación importante de jugadores. Se vuelve a perder un mundial, una olimpiada; son procesos que no concluyen. Me gustaría que a esta representación se le diera continuidad con partidos internacionales, porque la Selección Mayor debe tener un cambio generacional después de este mundial de Catar”.

Lea también: Otro jugador que rechaza al Saprissa

Ciertamente, como dice Barrantes, no solo quedamos fuera del Mundial; también perdimos el chance de ir a los Juegos Olímpicos de París 2024, así como a los Juegos Panamericanos.

Algo no debe estar haciéndose bien puesto que los resultados ya son reiterados, fracaso tras fracaso en selecciones menores. Por ejemplo, si comparamos lo hecho entre mediados de la década de los 90 y principios de los 2000, donde la sub20 clasificó a cuatro mundiales consecutivos -Catar 1995, Malasia 1997, Nigeria 1999 y Argentina 2001- y lo actual (cuatro eliminaciones de cinco posibles) es claro que algo se dejó de hacer.

La escogencia de técnicos no ha sido la mejor. Yo creo que el material humano sí existe. En nuestro país salen muy buenos futbolistas, hasta por debajo de las piedras. La cosa es saber guiarlos, llevarlos por procesos correctos, pulirlos hasta conseguir su verdadero potencial.

El mismo técnico Kenneth Barrantes lo reconoce así: “Hay algo que se hace mal. Material yo creo que hay. Siempre ha habido una buena generación de jugadores y me parece que los equipos del país le han dado mucho énfasis a las ligas menores, pero los futbolistas llegan con ciertas deficiencias a las selecciones”.

Un futbol donde lo que interesa es clasificar al Mundial mayor para recibir millones de dólares y jugar un campeonato nacional poco competitivo pero “emocionante”, sin planificación de absolutamente nada, parece ser la respuesta obvia a los constantes fracasos de nuestras selecciones menores.

More in Mirada Incisiva