La Federación Costarricense de Fútbol (FEDEFUTBOL) entró en conflicto con el Ministerio de Salud por la presencia de público en el Estadio Nacional para el partido del próximo domingo ante El Salvador.
Así, a este momento, la decisión de la FEDEFUTBOL es jugar el partido a puerta cerrada, según anunció su presidente, Rodolfo Villalobos este medio día, en conferencia de prensa.
El dirigente explicó que, si bien el Ministerio de Salud autorizó el ingreso de 5.000 aficionados al partido, lo hizo bajo la premisa de que la organización debía verificar que se tratara de personas con esquema completo de vacunación contra el COVID-19.
Además, se debería mantener el distanciamiento social, y las burbujas tendrían que ser de hasta tres personas.
Estas condiciones, dijo Villalobos, son inaceptables por parte de la FEDEFUTBOL, dado que llegaron a destiempo, apenas el viernes pasado, cuando ya, por ejemplo, los patrocinadores, que tienen derecho a una cuota de entradas, habían dispuesto los mecanismos para distribuirlos, sin contar con que debían verificar la vacunación.
Volver al plan piloto
Ante la situación, la FEDEFUTBOL pidió al Ministerio de Salud volver a aplicar el plan piloto que se usó en los partidos del mes pasado, con 3000 aficionados en el estadio.
Pero esto no fue aceptado pues se insiste en la necesidad de certificar la vacunación, algo que Rodolfo Villalobos considera irracional.
“Sigo sin comprender por qué un protocolo probado no puede repetirse de la forma exitosa que se dio”, indicó.
Recuento de hechos
Villalobos aseguró que los dirigentes del fútbol han atendido los requerimientos del Gobierno en relación con la pandemia del COVID-19, y para ello hizo un recuento de las gestiones realizadas en relación con el tema.
Al mismo tiempo, se lamentó de que mientras en otros países se ha avanzado hacia la presencia de aficionados en los estados, aquí se sigue con restricciones absolutas.
Recordó que con el Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos se formuló una matriz con una estimación para recibir 12.300 aficionados cumpliendo en el distanciamiento social.
Pese a ello, el Ministerio de Salud solo autorizó 3.000 aficionados para los juegos del mes pasado, ante México y Jamaica, en el marco de la eliminatoria mundialista rumbo a Catar 2022.
A partir de allí, se le presentó al Ministerio una propuesta destinada a permitir un 50 por ciento de aforo, pero todos vacunados, con lo cual serían algo más de 15 mil los aficionados presentes. La otra opción que se planteó era de 6.000 personas, con distanciamiento social y en burbujas de hasta tres personas.
En este último caso, se habilitarían tres portones para que accedieran un máximo de 2000 personas por cada una.
Pero, el Gobierno aprobó 5000 aficionados con el esquema de vacunación completo, además de mantener el distanciamiento social. Esto, la FEDEFUTBOL no lo vio vienen tanto no tiene forma de verificar la vacunación, explicó Villalobos.
Ante ello, el 28 de setiembre se remitió al ministro de Salud, doctor Daniel Salas, una nota, donde se le pedía revisar el acuerdo sobre los 5.000 aficionados para el juego ante El Salvador.
Y, además, que se contemplara la posibilidad de avanzar a un 50 por ciento de aforo con vacunación, pero que fueran las autoridades las que verificaran esto último dado que la FEDEFUTBOL no tiene los mecanismos para ello.
La respuesta del doctor Salas, el viernes pasado, fue que el mecanismo de certificación de la vacunación era el que había establecido el Ministerio de Salud, y que cada persona debe tramitarlo individualmente para ingresar al estadio.
Esto, de nuevo, generó un choque, dado que, según Rodolfo Villalobos, el proceso está tomando hasta un mes, amén de que hay datos contradictorios a nivel del Gobierno sobre cuántas personas ya tienen la certificación en mano.
Recordó que no es un documento que la gente requiriera normalmente para algún trámite, por lo que muchos ni siquiera lo han gestionado, y dijo que, una vez hecha la solicitud, se está tardando entre 10 días y un mes para emitirlo.