Este fue el primer partido en el Mundial de fútbol Femenino en que el equipo que tuvo menos posesión de pelota se llevó la victoria. La Selección de Corea manejó el balón un 57 por ciento del tiempo, pero cedió dos goles para terminar perdiendo ante la representación de Nigeria.
Y, de hecho, la posesión de las coreanas se reflejó en oportunidad creadas frente al área rival, pues en ese rubro también superaron a sus rivales, 15 por 12. Pero, no concretaron ninguna de las que generaron.
Quizá fue parte de la estrategia de Nigeria el dejar que las coreanas tuvieran el balón. El equipo se agrupaba bien en su propio terreno, y una vez que recuperaba la pelota, las salidas eran letales en velocidad.
Así, el juego muy pronto se llenó de llegadas a las dos áreas, con intervenciones importantes, especialmente de la guardameta nigeriana, Nnadozie, que incluso sacó un balón que iba al ángulo.
Apenas sobre 29 minutos, el partido se comenzó a dibujar para Nigeria, cuando Kim Doyeon incurrió en autogol, al tratar de desviar un balón en su propia área.
El cierre del primer tiempo llegó con un cuadro nigeriano centrado en la explotación de su fuerza y velocidad para inquietar a la defensiva coreana. En ese ejercicio destacaron Ngozi Ebere y Chinaza Uchendu, que siempre preocuparon a sus rivales.
Corea, entretanto, se desconcertó tras el error en la anotación, pero pronto regresó al partido para volver a hacerse del balón.
Si bien no lució en el primer tiempo, la gran figura de Nigeria, Asisat Oshoala mejoró en su dinámica en la segunda mitad, y terminó por hacer sentir su peso en la línea ofensiva, con la segunda anotación para su equipo.
Corea había presionado persistentemente en los minutos iniciales de esa segunda etapa, en procura del empate, y metió atrás a sus rivales, que ya estaban demasiado cerca de su marco, pero siempre lograron salir adelante a base de orden en ese trabajo de marca. También, desde el banquillo vino un ajuste, con el ingreso de Halimatu Ayinde, en el medio campo, para tratar de cortar el ritmo que imponía el cuadro asiático.
Sobre 75 minutos, de nuevo una salida rápida traería ventajas para Nigeria, que encontró mucho espacio. Oshoala recibió el balón por izquierda, recorrió varios metros y sacó remate a quemarropa sobre la arquera, culminando de manera favorable un servicio de Okeke.
En los últimos minutos Corea intensificó aún más su presión sobre el área rival, pero no pudo descontar en el marcador, exhibiendo reiterados errores en materia de definición.