Últimamente la sensibilidad de los aficionados al fútbol está en su máximo nivel. Faltaba que algunos seleccionados nacionales y el técnico, Luis Fernando Suárez, pusieran la idea sobre la mesa de ir por el título mundial para que salieran los críticos desde todos los sectores a bajar de la nube a quienes así sueñan.
Yo prefiero que haya objetivos altos a conformarnos con ser últimos, para lo cual, coincido con Suárez en declaraciones que vi en ESPN, en el programa Equipo F, cuando dice que no ve a la Selección quedando de última en el Mundial.
Aunque en Italia 90 propios y extraños pensaron que Costa Rica no pasaría de media cancha en ningún partido de ese, su primer Mundial y, para Brasil 2014, el desaparecido Diego Maradona, al mirar el grupo de la Tricolor, dijo que era mejor pegarse un tiro si fuera costarricense, lo cierto es que la Sele se ha ganado un nombre en el Mundial o en los mundiales.
Entre otras cosas, el ser la primera Selección del área en ganar en Europa a selecciones europeas… y, luego, hacer la proeza de llegar a cuartos de final en medio de batirse con selecciones campeonas del mundo, algunos motivos que dejan siempre la expectativa elevada sobre lo que puede hacer la Tricolor en un Mundial.
Una vez más, le toca enfrentar a campeonas del mundo… como España y Alemania. Una vez más los ojos están sobre Costa Rica pues tiene figuras, como Navas, Ruiz o Borges, que son conocidas en el concierto mundial. Especialmente Navas; si no fuera costarricense, es indudable que jamás hubiera sido relegado a la banca en el PSG o en su momento en Madrid.
Además, no es un dato menor: Costa Rica alcanzó el último boleto a la justa de Qatar y eso hizo que la prensa pusiera especial atención sobre ese cupo 32.
Por otro lado, tiene un técnico que se mete entre los históricos por la cantidad de mundiales en que ha dirigido.
Costa Rica es referente… y aunque en el papel luce débil sobre las grandes favoritas y otras selecciones más fuertes, se le da el beneficio de la duda de buscar algo más en la competición.
Ahora, sobre las opciones reales en el papel, hay que decir que a la Selección le falta el dinamismo del fútbol moderno y sus jugadores estrella ya superan una edad que no es la más atractiva en el mercado de piernas.
Queda siempre la interrogante sobre la inactividad de titular de Navas, si bien es, a la vez, la figura que más seguridad nos brinda. Con Navas yo voy de titular, de suplente y de relevo dos si fuera necesario. O con solo él completaría los once cupos de mi equipo titular.
En otro momento hablamos que a esta generación de futbolistas hay que hacerle un monumento por lo que han aportado en logros y alegrías para el país. En la Fedefútbol y clubes, además, deben atribuirles las grandes sumas de dinero ganadas en mundiales y por patrocinadores.
Como punto a favor, uno espera que lo que a Costa Rica le falte en cualidades técnicas o físicas, lo supere con creces en aspecto mental y táctico. No es un equipo que se asuste por enfrentar a Alemania. No es un equipo que no conozca lo que es superar la adversidad. Por ahí es que surgen fortalezas alrededor de este combinado, sumado a algunas figuras jóvenes que han sabido ganarse el campo.
A diferencia de lo que era el fútbol nacional antes de 1990, es claro que no estamos para ganar experiencia. Deberíamos evolucionar a definir nuestra identidad (que va siendo la de un equipo bien armado atrás, con cierta magia de la media cancha hacia adelante, gracias a jugadores pícaros que hacen hasta taquitos en los mundiales). Tenemos delanteros veloces… nos hemos caracterizado por tener volantes mixtos que saben armar buenas transiciones.
Podríamos seguir analizando… pero el Mundial es, de inicio, tres partidos, y el que sepa aprovechar el momento, encontrará el pasaje a la otra ronda.
Coincido con Suárez en que este es un Mundial para disfrutar. Él lo decía porque con Ecuador en 2006, era su primera justa y, apenas conocía de estas cosas… la exigencia era otra. Con Honduras, en 2014, la presión fue de otro tipo para él y es claro que las condiciones terminaron con un Mundial apenas de participación en ese entonces.
Costa Rica despide en este Mundial a su mejor generación… Suárez tiene la responsabilidad, durante y al acabarlo, de completar el cambio generacional y buscar no solo el boleto al Mundial 2026, sino que, deberíamos ilusionarnos con mucho más.
Gerardo Mora Pana es un periodista con más de 20 años de experiencia en medios de comunicación de Costa Rica. Se desempeñó en el desaparecido diario La Prensa Libre y en la edición local de la revista El Gráfico. Actualmente, es el director de Radio Santa Clara, de la red de medios de comunicación de la Iglesia Católica.