Era el 15 de junio del año 2006. Dirigía a Ecuador Luis Fernando Suárez, el actual seleccionador costarricense. Colgaba el marcador en un partido mundialista en territorio alemán: Ecuador 3, Costa Rica 0.
No recuerdo un partido que marcara tan claramente la diferencia futbolística para un país como Costa Rica con respecto a su rival. Hablo de un partido oficial en el plano netamente competitivo y en el más alto nivel. Ese juego dejó en claro que mientras el mundo implementaba fútbol dinámico, explosivo, rápido; nuestra nación se había quedado en el tiempo, como paralizada.
15 años después, un 16 de julio de 2021, Suárez enfrentaba a Surinam, un rival bastante débil, en Copa de Oro, y al mando de Costa Rica. Aunque Costa Rica ganó 2-1, Suárez dio la sentencia: “les dije en el primer tiempo que jugábamos a 10 kilómetros por hora”.
“Así no se juega el fútbol ahora. Tenemos que darle un poquitico más de velocidad al juego, que en el primer tiempo no se presentó y en el segundo sí”, decía Suárez. Quisiera atreverme a agregar a esto que dice el señor Suárez, que el fútbol no se juega así ahora, ni hace 5 años, ni hace 15 años. Sí, el Mundial en Alemania nos dejó claro que el fútbol no se jugaba así en ese entonces, y precisamente el Ecuador de Suárez era muestra de fútbol moderno.
Pasaron esos 15 años desde el Mundial de 2006 y el fútbol de Costa Rica no ha visto grandes cambios en su estilo de juego. Sí, muy destacada la participación en Brasil 2014, reconocida por su táctica, por su lucha, por su estado físico. Imborrable momento ese del Mundial 2014 y se marca como lo mejor que ha hecho nuestro fútbol, pero… sigue quedando en deuda con la velocidad y la dinámica del fútbol moderno.
• La tarea no es fácil, porque no es una tarea que corresponda solo a la Selección. Corresponde a todos los equipos que están en el fútbol federado de nuestro país.
Recuerdo perfectamente a otro seleccionador que tuvo Costa Rica, precisamente en ese proceso eliminatorio de Alemania 2006. Hablo del norteamericano Steve Sampson. Ya en el 2003, Sampson hablaba entonces que la Selección tenía que ser más veloz y más dinámica, con o sin balón. Era un discurso nuevo para el entorno de ese momento.
Justo, fue Sampson el primer entrenador, que venido del fútbol estadounidense empezó a hablar con vehemencia de conceptos que todavía no estaban claros en nuestro país y con los cuales, desde luego, no estábamos familiarizados en el terreno de juego.
Casi dos décadas después de la necesidad que tenía Sampson, o de la indicación que nos daba, Costa Rica sigue necesitando mayor fluidez de juego, más rapidez, más dinámica. Sampson se hizo famoso por esa que se convirtió en toda una súplica… la dinámica de la Sele.
La tarea no es fácil, porque no es una tarea que corresponda solo a la Selección. Corresponde a todos los equipos que están en el fútbol federado de nuestro país.
Es más, para irme a aquel ya lejano 2003, recuerdo que, hablando con Carlos Watson, entonces entrenador del Club Sport Herediano, respecto a la dinámica que pedía Sampson, me decía: el problema no es de Sampson, él solo tiene que escoger a los jugadores que se amolden a ese esquema que está pidiendo en la Selección.
Esto lo cuento hoy porque como vemos, Watson se ha mantenido vigente en nuestro fútbol, como un formador innato, un técnico que ha traído importantes glorias a nuestro fútbol y que también debe sumar responsabilidad en algunas cuantas derrotas o fracasos. Watson está en la Federación. Pero sigue sin haber dinámica. No se puede ir al supermercado a buscar lo que no hay. La federación y la organización en general de nuestro país debe propiciar que haya cacao para hacer chocolate.
Ni Sampson podía llamar a los jugadores para un sistema que quiso, ni el fútbol costarricense ha surtido lo necesario para dejar de jugar en pleno 2021 a 10 kilómetros por hora.
Puede que ciertas necesidades se suplan de otras maneras. Pero, si nos vamos a ver la Eurocopa, sabemos que se juega a otro ritmo y Costa Rica no está a ese nivel.
Por eso digo que la tarea es tremenda. Luis Fernando Suárez lo sabe, conoce el entorno e irá conociendo con quién podrá contar para hacer lo que necesita: de momento, clasificar al Mundial, para ver si, nos tomamos en serio luego, un proceso verdadero hacia el 2026 y mejor aún, para ver si nos tomamos en serio que tenemos que dejar de jugar a 10 km por hora.
