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Fútbol

Limón fue un rompecabezas para Santos

El equipo de Limón FC fue uno de esos laberintos insalvables para la Asociación Deportiva Santos. El empate 1 – 1 le permite a los dirigidos por Ricardo Allen sacar otro punto de diferencia sobre el último lugar, mientras los guapileños desperdiciaron la oportunidad de consolidar el tercer puesto de la clasificación.

Al inicio, Santos se metió mejor en el partido, y con combinaciones entre Williams, Matarrita y los jamaiquinos East y Foster, trataba de llevar peligro al área de Bryan Cordero.

Pero, sobre 10 minutos, una merma en el fluido eléctrico interrumpió el juego, que se reanudaría apenas tras 12 minutos de espera. A partir de allí, los dos equipos fueron otros. Limón, con mejor dinámica y Santos, muy desordenado en todas sus líneas.

Limón abrió el marcador en 24 minutos, con una sencilla definición de Alexander Espinoza, que cerró un centro de Pemberton, desde el costado izquierdo. La marca en defensa por parte del Santos fue muy floja y nadie llegó a tapar por el centro. El arquero Emer Espinoza tampoco pudo haber nada.

Dos minutos más tarde, el mismo Pemberton recibió un pase preciso por el centro, y avanzó en solitario sobre la portería, pero remató apenas desviado.

Limón era mucho más que Santos en el juego. Le recetó a Santos mucha velocidad por los costados, especialmente en sector izquierdo, donde había un verdadero coladero.

Así, Nelson probó las manos y la reacción de Espinoza, que reaccionó bien para desviar el remate.

Santos volvió a asomar sobre el área limonense en los últimos minutos, pero no pudo llegar a la paridad. La velocidad de East y Foster realmente no era problema para la zaga visitante.

En el arranque del segundo tiempo, Foster se perdió el empate al no cerrar a tiempo un servicio de Armando Ruiz, en una acción muy similar a la del gol de Limón, y por el mismo sector de la cancha.

Este tramo del partido fue de muchas imprecisiones, especialmente por parte de los santistas, que conducían en exceso para casi siempre entregar mal. Y cuando llegaban al área, terminaban mal la jugada.

Cuando lograron ordenarse, East se perdió dos seguidas, y luego fue Matarrita que no pudo concretar. Cordero salvó dos veces, por abajo. Eran los mejores momentos del Santos en el partido, pero Limón no se amedrentaba. De hecho, ganaba todos los balones divididos.

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