La Selección Femenina de Fútbol vibró con un resultado abultado de 5-0 ante la Selección de Guatemala, pero con la conciencia diciendo que los rivales que vienen serán una tarea en extremo complicada.
“Estamos felices de haber finalizado con todos los puntos esta primera fase y con cero atrás. El equipo trabajó durísimo durante mucho tiempo, estamos felices. El trabajo que se hizo en enero y diciembre nos ayudó a cada jugadora. Hoy pudimos cerrar el buen trabajo”, explicó Daniela Cruz.
Las ticas golearon y la seleccionada Daniela Cruz reconoce que eso significa un golpe anímico importante, pero tienen claridad de que lo que enfrentarán en México serán rivales como el actual campeón mundial actual Estados Unidos, Canadá medallista de los Juegos Olímpicos y el mismo anfitrión, México quienes tienen selección bastante fuerte.
“No es nuevo para las que ya tenemos tiempo acá en la Selección son rivales habituales, sabemos a lo que vamos y tenemos clara la diferencia de rivales que nos vamos a enfrentar en esta segunda fase”, indicó.
Las ticas no planean achicarse ante ningún rival. Melissa Herrera dice que desde ya la consigna es pelear por los tres puntos, sea cual sea el rival de turno.
“A mí me agrada enfrentar a grandes selecciones, grandes jugadoras, me parece que es la gran motivación personal de cada jugadora. Sabemos la calidad que tiene CONCACAF en el Premundial. Selecciones que han crecido, pero a nosotras no nos importa quien esté al frente, si queremos ir al Mundial hay que sumar”, aseveró Melissa Herrera.
El apoyo de la afición
Según datos de la FEDEFUTBOL, el juego ante la Selección de Guatemala, contó con una asistencia de 6500 personas en graderías, una cifra pocas veces vista en el fútbol local.
Melissa Herrera, manifestó que, junto a sus compañeras, no se esperaban tanto apoyo por parte de la afición costarricense y por eso al final todas las jugadoras se fueron a agradecer a todas las personas que estuvieron presentes apoyándolas y celebrando los goles junto a ellas.
“Yo me sorprendí, no espera ver gente arribita también. La gente que se hizo presente nos ayudó y dejenme decir que cuando escuchaba el vamos, es una sensación que no se compara. Cuando una compañera marca y escuchar celebrar a la gente eso no tiene comparación”, finalizó Herrera.