La Sele básicamente fue testigo en lugar de actor, siquiera secundario, en el primer tiempo del juego ante Ecuador, que se saldó con derrota 3- 1. Y aunque por tramos asomó en el segundo tiempo, solo lo hizo para reafirmar que es intermitente en su desempeño.
Para más, el juego del conjunto costarricense sigue siendo lento; muy lento, cuando el fútbol hoy se juega a otra marcha. Y pareciera que algunos no pueden con eso y otros, no se han dado cuenta.
Síntesis del juego
Ecuador 3 – 1 Costa Rica
Juego internacional amistoso.
Alineaciones:
Ecuador: Alex Domínguez, Robert Arboleda, William Pacho, Pervis Estupiñán, Enner Valencia (Alan Franco, 79’), Ángel Mena (Pedro Vite, 66’), Ángelo Preciado (Carlos Gruezo, 76’), Jordy Alcívar (José Hurtado, 76’), Leo Realpe (Félix Torres, 79’), Moisés Caicedo y José Cifuentes. D.T.: Félix Sánchez Bas.
Costa Rica: Kevin Chamorro, Pablo Arboine, Kendall Waston, Juan Pablo Vargas (Francisco Calvo, 75’), Carlos Martínez (Anthony Contreras, 46’), Suhander Zúñiga, Roan Wilson (Wilmer Azofeifa, 75’), Christopher Núñez (Ricardo Peña, 46’), Josimar Alcoser, Warren Madrigal (Carlos Mora, 65’) y Joel Campbell. D.T.: Luis Fernando Suárez.
Arbitraje: Víctor Cáceres, árbitro. Corey Rockwell y Brooke Mayo, asistentes. Joshua Encarnación, secretario.
Goles:
1 – 0: Enner Valencia, 20’.
2 – 0: William Pacho, 56’.
2 – 1: Joel Campbell, 66’.
3 – 1: Pedro Vite, 82’.
Estadio: Subarú Park, en Philadelphia, Estados Unidos.
Fecha: martes 20 de junio, 2023.
La Sele corre; Ecuador juega
Como suele ocurrir cuando juega La Sele, en el primer minuto y medio el equipo se atrevió a salir. Después, o no quiso o no pudo. Ecuador mandó casi de principio a fin en la primera parte del encuentro.
Las subidas rápidas de Valencia y Mena exhibieron sistemáticamente a la línea defensiva costarricense. Los laterales nunca pudieron ponerse a tono en la marca. Y, por el centro del campo, los dos volantes de marca fueron muy flojos, especialmente cuando Preciado tomaba la pelota. De hecho, Wilson siempre caminó en lugar de correr.
Así, en cinco minutos, ya lo sudamericanos habían gestado tres acciones de peligro en el área de La Sele. Su velocidad, técnica y determinación los hacían notablemente superiores.
La primera llegada de La Sele fue sobre 15 minutos. Una acción entre Madrigal y Alcoser dejó al primero de frente al arco. Pero, hizo un segundo control que permitió la llegada del arquero a tapar su remate.
Pero, apenas cinco minutos más tarde el dominio de Ecuador se reflejaba en el marcador. Enner Valencia superó el asomo de Arboine para luego sacar su remate de derecha. En un rompimiento rápido tras recupera la pelota, los sudamericanos llegaron pronto al área. Los defensores ticos quedaron en el camino, al igual que el contención. Chamorro no pudo haber nada para evitar el gol.
El segundo remate de La Sele, por parte de Núñez, llegó cuando corría el minuto 43 de juego. Muy flojo y sin problemas para Domínguez. Y muy poco para cualquier equipo que pretenda algo en el fútbol.
Cambio de esquema; no de rendimiento
Para el segundo tiempo, Suárez cambió a línea de 4 en el fondo. De todas maneras, en la acción del gol ecuatoriano la línea de 5 quedó tan desarmada que solo aparecieron dos centrales en escena, y muy lejos de la pelota.
Pese a ello, el juego no cambió, porque Ecuador seguía dominando. Así, el segundo tanto cayó en 56 minutos de juego. Cifuentes ganó arriba y dejó su servicio para William Pacho, que de frente al arco y con la marca tardía de Waston, solo tuvo que tocar a la red.
Entonces, el ingreso de Mora sí supuso algo diferente. Esta vez Suárez lo envió por donde juega regularmente en su equipo. No hubo inventos. Eso, sin embargo, no implicó que Chamorro no tuviera mucho trabajo.
La única jugada clara de La Sele terminó en gol. Mora gestó un buen pase para Contreras, que sacó centro largo. Joel Campbell le entró con todo al balón para conectar con la red. Corrían 66 minutos.
Chamorro, que había tenido grandes intervenciones especialmente en el primer tiempo, falló al 82’, cuando Pedro Vite sacó un remate ajustado al palo, pero no0 muy fuerte, y se le coló en la red.
El juego terminó en medio del ole, ole que resonaba en las gradas cada vez que los sudamericanos tocaban la pelota a placer.
