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Fútbol

La Sele Femenina reaccionó apenas para evitar una catástrofe

María Paula Salas casi no llegó al área rival ante el poco juego ofensivo de La Sele Femenina. Foto: Fifa.
María Paula Salas casi no llegó al área rival ante el poco juego ofensivo de La Sele Femenina. Foto: Fifa.

La Sele Femenina de Fútbol Mayor debutó con derrota frente a España en la Copa Mundial Femenina de la FIFA Australia & Nueva Zelanda 2023. Pero, al menos pudo ajustar en un momento clave del partido para evitar una catástrofe en el marcador.

El 3 – 0, con anotaciones concentradas en seis minutos fatales al intermedio del primer tiempo, pudo ser más amplio, también, de no ser por la gran actuación de la portera Daniela Solera.

Síntesis del juego

España 3 – 0 Costa Rica

Jornada 1, Fase de Grupos, Copa Mundial Femenina de la FFA Australia & Nueva Zelanda 2023

Alineaciones:

España: Misa Rodríguez, Ona Batlle (Oihane Hernández, 88’), Teresa Abelleira (Claudia Zornoza, 77’), Irene Paredes, Ivana Andrés, Aitana Bonmati, Esther González (Alba Redondo, 63’), Jenifer Hermoso, Salma Paralluelo (Alexia Putellas, 77’), Olga Carmona y Athenea Del Castillo (Mariona Caldentey, 63’). D.T.: Jorge Vilda.

Costa Rica: Daniela Solera, María Paula Coto, Mariana Benavides, Valeria Del Campo, Melissa Herrera, María Paula Salas (Sheika Scott, 73’), Gloriana Villalobos (Alexandra Pinell, 73’), María Paula Elizondo (Cristin Granados, 58’), Priscilla Chinchilla, Katherine Alvarado y Fabiola Villalobos. D.T.: Amelia Valverde.

Arbitraje: Casey Reibelt, árbitra. Ramina Tsoi y Lijun Xie, asistentes. Yujeong, secretaria. Marco Fritz, VAR. Armando Villarreal, AVAR 1. Sian Massey-Ellis, AVAR 2.

Goles:

1 – 0: Valeria Del Campo, en propia meta, 21’.
2 – 0: Aitana Bonmati, 23’.
3 – 0: Esther González, 27’.

Estadio: Sky Stadium, en Wellington, Nueva Zelanda.

Fecha: viernes 21 de julio, 2023.

Muy, muy, muy poco de La Sele Femenina

La Sele Femenina planteó un juego con el que desde el inicio se notaba que iba a sufrir mucho. Las 10 jugadoras de campo del rival se plantaban siempre en terreno ofensivo, armando sus jugadas delante de la línea media de la cancha.

Así, los recorridos para llegar al área eran mucho más cortos y con mucha gente. Del lado nuestro, eso llevaba a que se jugara casi siempre dentro del área. Cuando se atinaba a rechazar, los segundos balones eran de España porque no había nadie al frente.

El equipo costarricense no tenía la pelota y no encontraba formas de recuperarla. Además, pese a tener muchas jugadoras metidas atrás, en realidad no ejercía una marca sólida y dejaba espacios al punto que las rivales recibían libres dentro de los 16,50.

Herrera, Chinchilla y Salas eran más defensoras que otra cosa en un equipo que no gestaba nada. Tanto así que las centrales de España muchas veces se posicionaron justo al frente de la media luna del área. De hecho, solo dos veces, gracias al empuje de Herrera, el equipo se acercó último cuarto de cancha.

Un gol tras otro

En ese escenario de una presión asfixiante era cuestión de tiempo para que España abriera el marcador. Lo que no se pensaba era que iba a ser con ayuda de la Nacional. Valeria Del campo terminó por desviar el balón sobre su propio arco cuando Solera no pudo cortar un centro de González. Corrían 21 minutos de partido.

Y solo dos minutos después caía el segundo tanto. Aitana Bonmati sacó remate claro al arco después de una sucesión de pases dentro del área, sin que el conjunto costarricense atinara a sacar el balón de esa zona.

Las cifras ya eran de 3 – 0 tan pronto como en 27 minutos de partido, ante dos muy flojos despejes de pelota que no alcanzaron a sacar el balón siquiera del área.

Para más, Fabiola Villalobos cometió penal sobre Carmona en 33 minutos. Fue a la marca sin sentido ni precisión. Jenifer Hermoso se encargó de cobro, pero Solera detuvo.

Mejora la disposición de La Sele Femenina

En la segunda mitad La Sele Femenina tampoco ofreció mucho. Pero, al menos, mejoró en la disposición para tratar de tocar la pelota cuando se recuperaba.

Así, al menos se le daban algunos segundos de descanso a la defensa en ciertos momentos del partido, al alejar el balón del área.

A eso hay que sumar un bajón en la presión por parte de España, que comenzó a padecer en el plano físico y eso le quitó precisión en los servicios.

Entonces, el equipo costarricense sufrió menos. No es que el rival no llegaba (de hecho, superó las 40 llegadas). Es que en la primera parte el dominio fue asfixiante. Y eso cambió para el cierre.

También, el ajuste en defensa, pasando a línea de cuatro, con Coto por izquierda, ayudó un poco, sumado al ingreso de Granados, que sumó más en la marca en el medio campo.

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