Kliver Gómez, el lateral derecho, nueva ficha del Deportivo Saprissa, confesó en qué momento se planteó su llegada al conjunto morado. Vivir un partido en la cancha del estadio Ricardo Saprissa, como rival del campeón nacional, lo marcó para soñar con el momento que hoy vive.
Saprissa confirmó esta noche la contratación de Gómez, aunque estaba claro desde mucho antes que la transacción con Puntarenas FC, su equipo anterior, era un hecho.
Como parte del acuerdo, el equipo porteño conservó un 20 por ciento de la carta del jugador, con la esperanza de aumentar sus beneficios en caso de una venta posterior por parte del Saprissa.
Gómez agradeció a Dios, en primer lugar, y luego a su familia. Pero, también, a Felipe Medina, el propietario del Puntarenas FC, y Silvia Bolaños, la presidenta del equipo.
“Súper contento de venir a defender los colores del equipo más grande de Centroamérica”, dijo Kliver Gómez en sus primeras manifestaciones como integrante del Saprissa.
“Me voy a preparar al máximo para cuando me toque la oportunidad, hacerlo de la mejor manera”, puntualizó.
Confesó que se visualizaba llegando al Saprissa en unos años, pero no tan pronto como se dio. Hay que recordar que Gómez fue uno de los integrantes del plantel porteño que logró el ascenso a la primera división en junio del año anterior.
Un Kliver Gómez orgulloso
“Yo creo que es de sentirme orgulloso. Mi familia está orgullosa también de todo lo que estoy logrando”, añadió el jugador.
En un primer mensaje a la exigente afición del Saprissa, Kliver Gómez dijo que viene a dar su mejor esfuerzo. Se comprometió a luchar en cada entrenamiento y en cada partido, y no dar una pelota por perdida.
“Si, yo llamé a doña Silvia y, después, a din Felipe, y les dije que era mi sueño jugar aquí en Saprissa”, admitió el jugador. Más temprano Silvia Bolaños había dicho que Gómez quería salir de Puntarenas, y eso pesó en la decisión de negociar con el conjunto morado.
El lateral explicó que le marcó mucho el juego de visita de Puntarenas en el Ricardo Saprissa, en el torneo anterior; especialmente por la forma en que los aficionados viven el partido en las gradas.
Eso, dijo, “me hizo sentir esa chispa morada… Fue un espectáculo el mosaico ese”, afirmó. Allí pensó: “qué bonito estar en Saprissa. Qué bonito vivir todo eso”.
