La Copa Mundial Femenina de la FIFA Australia & Nueva Zelanda 2023 será la primera en la que las jugadoras recibirán un reconocimiento en efectivo por su participación.
Así lo dijo hoy el presidente de la FIFA, Giani Infantino, tras anunciar que se han dispuesto 152 millones de dólares en compensaciones por el torneo que tendrá lugar entre julio y agosto del presente año.
Serán 110 millones de dólares en premios para las 32 selecciones participantes. Además, 11,3 millones de dólares para los clubes a los que pertenecen las jugadoras, así como 30,7 millones de dólares para la preparación de las selecciones.
Ya desde el año anterior FIFA les había adelantado a las distintas federaciones la intención de ofrecer un premio económico por la participación en la Copa Mundial Femenina a partir de este año.
De hecho, si bien los recursos destinados a esos tres rubros siguen siendo menores a los que se manejan en el Mundial Masculino, se han triplicado respecto de la edición de Francia 2019 de la Copa Femenina.
Según Infantino, la cifra para este año supera por 10 veces los montos que se manejaron en Canadá 2015, la primera justa del orbe a la que asistió Costa Rica.
Sin embargo, no detallo cómo será la distribución de los dineros en cada uno de los tres rubros. Eso sí, la mayor parte tendrá que ir dirigido al desarrollo del fútbol femenino.
Igualdad, un objetivo en proceso
Infantino explicó que la ruta hacia la igualdad entre jugadoras y jugadoras comprende tres etapas. Las dos primeras corresponden directamente a la FIFA.
“El primer paso es la igualdad de condiciones y servicios para todos los hombres y mujeres que jueguen en una Copa Mundial de la FIFA. Esta será una realidad para la Copa Mundial Femenina 2023. Las mismas condiciones que 2022 serán para las jugadoras y el cuerpo técnico para la Copa Mundial Femenina 2023”, dijo el dirigente.
El segundo paso corresponde a los premios en efectivo para las selecciones, los equipos y las jugadoras representadas en la Copa Mundial.
El tercer paso, sin embargo, es visualizado por Infantino como el más complicado. Tiene que ver con su intención de comercializar el Mundial Femenino por separado respecto del Masculino.
Ya hace apenas unos meses el dirigente había lanzado algunas inquietudes sobre este tema. Pero, hoy, fue mucho más directo y agresivo.
Más acciones concretas
“Nuestra ambición sería, por supuesto, poder tener igualdad en los pagos para las Copas del Mundo masculinas de 2026 y femeninas de 2027. Este es el objetivo que nos marcamos. La FIFA se está intensificando con hechos, no solo con palabras como habéis visto, gracias a las decisiones del Consejo, con el aumento, en 2023, del premio en metálico”, apuntó Infantino.
Y añadió: “No solo palabras, sino acción. FIFA está dando un paso al frente, pero desafortunadamente este no es el caso para todos en la industria. Los locutores y los patrocinadores, queridos amigos, tienen que hacer más en este sentido, por la FIFA, por las confederaciones, por las asociaciones miembro, por todos.
“Porque es fácil criticar, pero es un poco más difícil actuar. La FIFA está recibiendo ofertas entre 10 y 100 veces inferiores para la Copa Mundial Femenina que para la Copa Mundial Masculina. Entonces, si una emisora, a menudo emisoras públicas en países grandes, nos ofrece 100 millones o más para transmitir la Copa Mundial masculina, nos ofrece un millón o menos para transmitir la Copa Mundial femenina. ¿Crees que esto es normal?”.
Infantino recordó que, desde esos mismos medios de comunicación, irónicamente, se suele criticar a la FIFA por no impulsar la igualdad salarial entre hombres y mujeres.
“La noticia que tengo para aquellas emisoras o patrocinadores que no quieran ofrecer cantidades similares a las del Mundial masculino es simplemente que no vamos a vender fútbol femenino y, un Mundial femenino a estos precios”, acotó el dirigente.
