Dice que no era lo que quería. Pero, Alexandre Guimaraes, técnico de Liga Deportiva Alajuelense, felicitó a sus jugadores tras el empate en el Clásico Nacional, ante Liga Deportiva Alajuelense.
“Yo creo que el equipo hoy mostró algo que debe tener un equipo que quiere ser campeón. Tuvo una resiliencia extraordinaria, lo cual lo hizo competir durante todo el partido. Pero, además, en las situaciones más difíciles”, explicó Guimaraes.
Dijo que los cambios fueron para tener más aceleraciones en el último cuarto de cancha y explotar mejor las bandas. Así se logró recuperar al menos un punto, “que para nosotros es importante”.
Adujo que, en cualquier otra oportunidad, tal vez el equipo hubiese respondido de otra manera.
Guimaraes señaló que el rival tiene lo suyo. “Estaba jugando prácticamente por un balón. Encontraron dos…”, repasó en relación con el desempeño del Saprissa.
Para el técnico, es surrealista que un jugador (Joseph Mora) le tome la camiseta a Joel Campbell, y que este lo arrastre 15 metros, pero el árbitro solo le muestra la tarjeta amarilla.
“Insisto: es que no puede ser amarilla, eso”, reflexionó el técnico, que destacó que los árbitros están tratando de darle fluidez al juego. Pero, deben tener criterio para establecer cuándo se debe tomar control de una situación ante las faltas reiterativas sobre un mismo jugador.
No hay pruebas, dice Guimaraes
“Yo no estoy probando nada. No estoy probando nada”, afirmó Guimaraes cuando se le preguntó sobre los cambios en la formación inicial. Justificó que como Saprissa explota mucho las bandas, decidió volver a jugar con laterales natos.
Y con ese esquema considera que, pese a unos minutos iniciales complejos, Alajuelense pudo reaccionar y meterse en el partido. Ya luego, los otros cambios fueron para conseguir ajustes sobre la marcha.
Además, defendió el trabajo de los laterales porque tuvieron mucha exigencia ante la forma en que jugaban los extremos del Saprissa. “Lo primero que se le pide a un lateral es cumplir en el terreno defensivo”, apuntó.
Para más, explicó que no es de los técnicos que sacan un extremo para meter otro extremo. Más bien, pensando en las virtudes de sus jugadores, prefiere hacer cambios sobre la marcha en cuanto al planteo del juego.
En ese sentido también requiere del convencimiento de los jugadores para interpretarlo que él quiere cuando recurre a los movimientos que plantea.
Agradeció a los aficionados, cuyo empuje para conseguir el empate fue fantástico, según dijo. “Ellos alentaron siempre, y eso a los jugadores les cayó muy bien”.
“Este tipo de partidos son esos partidos en que cuando terminás decís: recuperamos un punto”, resumió Guimaraes sobre la forma en que a lo interno del camerino toman el empate, por la forma en que se logró.
